El Camino de Santiago tiene muchísimas rutas de llegada hacia Santiago de Compostela, por lo que puede ser un poco complicado elegir cuál realizar. Puedes encontrar hasta 12 posibles caminos, dependiendo de tu punto de salida.

Podemos encontrar los siguientes:

• Camino Francés.
• Camino Portugués.
• Camino Portugués de la costa.
• Camino del Norte o de la costa.
• Camino Primitivo.
• Camino Inglés.
• Camino a Fisterra o Finisterre.
• Camino Sanabrés.
• Camino Vasco.
• Camino Aragonés.
• Camino de Madrid.
• Camino de Levante.
• Vía de la Plata.

Realmente muchos de ellos acaban desembocando en el Camino Frances, que es el que cruza toda la península desde los Pirineos hasta Santiago, como es el caso de Vasco, Aragonés, Madrid, Levante y Sanabrés (aunque primero estos llegan al de la vía de la Plata), y vía de la Plata.

Cómo recorrer el camino y rutas más populares

La verdadera pregunta que se tiene que hacer el futuro peregrino es la siguiente ¿cuántos días dispongo y cuántos kilómetros quiero recorrer?Lo más común entre los peregrinos es hacer los mínimos kilómetros para así poder obtener la Compostelana. Esto significa que para obtener la compostelana hay que recorrer los últimos 100km a pie o a caballo, o los últimos 200km en bicicleta de cualquiera de las rutas oficiales antes descritas. Lo más común es que el 93% de los peregrinos que llegan a Santiago sea a pie, y el resto a bicicleta (un 6% de los peregrinos), y muy pocos a caballo (a penas el 0,11% de los peregrinos).

Las opciones de rutas más elegidas por los peregrinos (por orden de elección) son sin duda el Camino Francés, el Camino Portugués, el Camino Portugués por la costa, el Camino del Norte y el Camino Inglés. 

Además, el Camino Francés forma parte del Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1993, y es el que eligen hacer el 54% de los peregrinos. Seguido del casi 19% de peregrinos que eligen el Portugués, después el 6% que elegirían el Inglés y el 5% que eligen el del Norte. 

Camino Francés

Este camino al ser el más popular, ello implica que es el más recorrido, ya sea desde Sarria (desde donde lo comienzan la mayoría de los peregrinos dado que son los últimos 112km y así pueden obtener la compostelana), o incluso desde ciudades más lejanas como León (309 km), Burgos (494 km), Logroño (624 km), Pamplona (685 km), Roncesvalles (750 km), o Saint Jean Pie de Port (773 km). 

Si tu idea es recorrer lo mínimo para la Compostelana, entonces tendrías que comenzar desde Sarria. Además, al ser el tramo que más se recorre por los peregrinos que se dirigen a Santiago, este tramo dispone de una gran cantidad de servicios, alojamientos, restaurantes y bares, infraestructuras, señalización, etc. Estos motivos hacen que muchos peregrinos eligan este camino precisamente por la tranquilidad de saber que siempre van a disponer de estos servicios a lo largo de las etapas y pueblos donde pernocten. A ello hay que sumarle que es una ruta de paisajes verdes y bosques frondosos que nunca defraudan a los peregrinos primerizos. Dos de nuestros miembros lo han realizado en dos ocasiones.

Al ser el camino más popular, ello puede hacer que encontrar alojamiento sea complicado en épocas de mayor peregrinación como primavera o verano, por lo que os recomendamos planificar este camino con suficiente antelación. 

Este camino casa muy bien con aquellos peregrinos que viajen solos o en grupos reducidos y estén en búsqueda de conocer a gente diferente durante su viaje, además si no quieres caminar solo es un camino muy concurrido por lo que en pocas ocasiones caminarás solo y siempre tendrás a más peregrinos a tu lado. También es ideal para grupos de amigos o familias numerosos por la cantidad de opciones de alojamientos con alta ocupación. Si lo que buscas es una aventura divertida y llena de gente nueva, esta será tu mejor elección. 

CAMINO PORTUGUÉS

Es el camino más realizado después del Francés. Lo más común es empezar a caminar desde Tui (114,9 km hacia Santiago y lo mínimo para la Compostelana), pero también se puede comenzar desde Viana do Castelo (176km), Oporto (243,8 km), Coimbra (374,5 km), Santarém (528,5 km), o Lisboa (622,2 km).

Si tu pensamiento es hacer el mínimo para la Compostelana, tendrías que empezar en Tui o incluso desde Valença y así cruzar la frontera entre Portugal y España (esta opción la eligen algunos peregrinos por el hecho de empezar desde Portugal y así poder decir que empezaste desde Portugal). 

Este camino también dispone de servicios, alojamientos, restaurantes y bares, infraestructuras y señalización, aunque no al nivel del Francés. Este camino es mucho más tranquilo al ser sólo recorrido por el 19% de los peregrinos que llegan a Santiago. Ello implica que no cuente con tanta infraestructura. En cuanto a la planificación del mismo y el hospedaje, este camino no ofrece tanta masificación como el Francés, por lo que se puede encontrar alojamiento en cualquier época del año.

Todo ello no lo hace el menos bello, al contrario, para nosotros es mucho más bonito este camino, bastante más lleno de vegetación, bosques, zonas de campo silvestre, pueblos con encanto, atraviesa diferentes rías con vistas espectaculares, etc. Además, es un camino que no está saturado de gente, por lo que promueve la concentración del peregrino en uno mismo, pensar sobre el rumbo de la vida, o simplemente poder disfrutar de caminar solo. Si buscas un camino tranquilo, donde poder tener tiempo con uno mismo, sin masificaciones de gente y con unas vistas espectaculares, sin duda, esta es tu mejor elección. 

Camino del norte o de la costa

Es el tercer camino que realizan algunos peregrinos, dado que solo el 7% de los peregrinos que llegan a Santiago lo hacen a través de este camino. Lo más común es empezar desde Baamonde (101,3 km hacia Santiago y el mínimo para la Compostelana) o también desde Vilalba (119,9 km), pero se puede comenzar desde Ribadeo (196,5 km), Gijón (346,4 km), Santander (553,2 km), Bilbao (667,6), San Sebastián (791,8 km) o desde Irún (816,6 km). 

Este camino es uno de los más exigentes físicamente hablando, contiene las etapas más duras, con muchos desniveles, por lo que no está hecho para cualquier peregrino. No todo son aspectos negativos, al discurrir por la costa norte los paisajes dejan sin aliento, con el mar cantábrico siempre a la derecha, con sus acantilados, picos, bahías, cabos, etc. Es un camino que es fantástico para aquellos que busquen disfrutar de la naturaleza del mar cantábrico, sus costas, cultura, etc.

El peregrino no tendrá ninguna dificultad para encontrar hospedaje durante todo el año dado que siempre dispone de suficiente capacidad para todos los peregrinos que realizan este camino. Aunque sí es cierto que la infraestructura, señalización, alojamientos, restaurantes, se encuentran en un número muy reducido. 

Ello cambia radicalmente en las últimas dos etapas antes de llegar a Santiago, dado que el Camino del Norte desemboca en el Camino Francés, por lo que las últimas dos etapas son más concurridas de peregrinos, infraestructura, alojamientos, etc.  Este camino es ideal para los amantes de la naturaleza, el mar, la soledad, del deporte al aire libre, o de aquellos peregrinos que quieran exigir un camino con más dificultad física.

Caminos menos comunes

Los caminos menos comunes son el Primitivo, Inglés, Sanabrés, Vasco, y Aragones. Estos caminos son transitados por apenas un puñado de peregrinos, por los que son ideales para aquellos peregrinos que buscan la tranquilidad y soledad. Su punto negativo es la falta de infraestructura, alojamientos y restaurantes enfocados a los peregrinos. Otro punto a tener en cuenta es que estos caminos desembocan en el Camino Francés, por lo que la relajación y tranquilidad duran hasta el momento donde se empieza a recorrer el Francés, con más peregrinos en su recorrido. 

En cuanto a la Vía de la Plata, el Camino de Madrid o el Camino de Levante, son caminos que son más transitados por peregrinos en bici que a pie. Ello es debido a que se realizan por grupos de ciclistas, federaciones de ciclismo, o simplemente por grupos de amigos amantes de las bicicletas. Al igual que en los anteriores caminos, no disponen de infraestructura suficiente, muchas veces hay mala señalización del camino, y poco hospedaje enfocado al peregrino. 

Sin duda alguna, estos caminos son los que más aventuras, sorpresas, y expectación puede ofrecer al peregrino.

Camino a Fisterra o Finisterre

Este es un camino algo más desconocido, pero que con el paso del tiempo muchos peregrinos deciden hacer. Es el único que empieza en Santiago de Compostela y tiene su final en Finisterre. Tiene un total de 90 km dividido en normalmente en 4 o 5 etapas. 

Los principales motivos que animan a los peregrinos a realizarlo es la constante conexión con la naturaleza, bosques frondosos, el aroma a eucalipto, prados verdes con vacas, y el olor a mar conforme el peregrino se acerca a la costa. Junto con otros motivos, como por ejemplo poder decir que has acabado «en el fin del mundo», o que al ser un camino que puedes hacer en 4 días, es ideal para los peregrinos que disponen de poco tiempo, o al contrario, para aquellos peregrinos que han llegado a Santiago a través de otros caminos y que quieren continuar su peregrinación hasta llegar a Finisterre. 

Otra opción para aquellos peregrinos que han llegado a Santiago y que disponen de poco tiempo, es llegar a Finisterre en autobús, o a través de excursiones privadas, donde llevan y traen al peregrino. Este lugar sobrecoge por la inmensidad del océano atlántico, sus fuertes mareas, y los acantilados que rompen con el mar. Un lugar donde poder observar los mejores atardeceres y hacer fotos espectaculares.